Para los grandes directivos o empresarios su tiempo es lo más valioso y si tenemos la oportunidad de tener 5 minutos con ellos, o con otra gente que sea de tu interés, hemos de tener previsto un discurso sobre nuestro proyecto y en este discurso hay cosas que no pueden faltar, aquí van algunas de ellas:
– Arranque interesante: se ha de captar la atención del interlocutor desde el inicio, se puede hacer mediante una pregunta, con el slogan de la marca, alguna anécdota, …
– Argumento sólido: elementos como lo que se vende, a quién, cómo lo haces, que necesidades cubres, experiencia de los promotores son esenciales en la parte de la argumentación de tu proyecto, hay que exponer las ideas esenciales y más importantes o diferenciadoras.
– Estilo: lenguaje siempre positivo, con naturalidad, sonriendo, mirando a los ojos de tu interlocutor, con tranquilidad como si se lo estuvieses contando a tus amigos, si tenemos en cuento todos estos puntos hará mucho más creíble nuestro discurso (que ya tendremos perfectamente planificado ;))
Hay que recordar por eso que sólo el 7% de la comunicación es verbal, el resto representa tu apariencia y lenguaje personal, tono, volumen, …) por lo que hay que aprovechar esos 5 minutos para transmitir nuestra idea en el momento idóneo, con confianza plena en lo que decimos y llenos de optimismo y entusiasmo.
