Si por algo destaca España en estos tiempos de crisis económica, positivamente hablando claro, es que tenemos un sector deportivo que, a pesar de los grandes recortes aplicados por todas las Administraciones, está resistiendo, dentro de lo que cabe, mejor la crisis que otros sectores de nuestra economía y, los grandes eventos deportivos tienen gran “culpa” de ello gracias al retorno de inversión que generan allí donde se llevan a cabo.
Toda organización de un gran evento deportivo comporta el compromiso activo de diferentes actores para que tenga éxito, desde patrocinadores privados a Entidades Públicas, pasando por los Organizadores y Colaboradores en los diferentes aspectos del Evento. A parte de la implicación de todas las Administraciones y Entidades existe una compleja tarea de coordinación, organización y, paralelamente, cuidando al máximo aspectos esenciales y básicos como la logística, la comunicación y promoción del mismo para asegurarnos que sea de interés, no sólo para el público en general, que es muy importante, sino también para que los patrocinadores confíen en su éxito y lo apoyen. Si se consigue que todo lo anterior salga a la perfección habremos logrado un gran evento que, aparte de los posibles éxitos deportivos también producirá unos beneficios económicos, no sólo para los Organizadores sino que también generará un impacto económico allí donde se haya llevado a cabo.
Este impacto económico se produce en diferentes áreas, desde el que producen los visitantes y espectadores que acuden al evento, como los que realiza la propia organización del mismo, invitados, … en forma de entradas, pernoctaciones, turismo, restauración, ocio, … que, según el tipo de evento y de espectadores que atraiga puede ser una gran fuente de ingresos directos para la economía local. Además, según la repercusión y seguimiento que obtenga el evento es un gran escaparate para promocionar la imagen del territorio para atraer ingresos en el futuro en forma de turistas o próximos eventos en la ciudad o zona donde se celebre el mismo, es un impacto que no se produce de inmediato pero que se espera que se materialice en el futuro. Si el evento es de una gran magnitud se pueden necesitar mejoras en los accesos, infraestructuras, instalaciones, … de la zona en la que se lleva a cabo y que representan unas mejoras para el uso y disfrute de sus habitantes.
Podemos citar algunos ejemplos del impacto económico que han representado estos grandes eventos deportivos, recientemente los XGames, primera edición que se han celebrado en Europa y que han tenido a Barcelona como sede durante 4 trepidantes días llenos de intensas emociones de deportes extremos y que han reportado a la ciudad condal unos 40 millones de euros sumando todos los conceptos. A finales de julio también se celebrarán los Mundiales de Natación que se esperan que tengan un gran impacto aunque menor al que han generado los XGames, otros eventos importantes como el Torneo Banc Sabadell- Godó de Tenis, la Fórmula 1 o el Gran Premio de Moto GP convierten a la ciudad de Barcelona en un gran referente mundial para grandes eventos deportivos pero no es la única, la Copa del Rey de baloncesto celebrada en Vitoria generó un impacto cercano a los 30 millones de euros. Mucho más modesto fue el impacto económico generado por La Vuelta en su recorrido por tierras gallegas debido a la gran inversión realizada por las Administraciones pero durante unos días las diferentes localidades de Galicia tuvieron un gran escaparate para atraer turismo con las bellas imágenes de esas tierras que todos pudimos disfrutar durante la retransmisión de las Etapas por tierras gallegas, esta edición repiten y se centrarán en la zona de las Rias Baixas promocionando de esta manera la zona para atraer a futuros turistas.
Las perspectivas de futuro también son bastante optimistas ya que para el próximo año España será sede de la Copa del Mundo de Baloncesto que se espera que genere un impacto de 300 millones de euros en el conjunto de todas las sedes y que tendrá a España como capital mundial del baloncesto durante unos días. Alicante será la salida, por segunda vez de la Volvo Ocean Race que se celebrará a finales del 2014, considerada la gran regata del mundo de la vela, generará un impacto en la Comunitat Valenciana cercano a los 90 millones de euros. Son sólo dos ejemplos de grandes eventos para el 2014 al que habrá que sumar el Mundial de la F-1, Motociclismo, nueva edición de los XGames e innumerables eventos de menor relevancia pero que aportaran también su granito de arena a dinamizar las economías locales. ¿Tenéis algún ejemplo más? Compartir vuestras opiniones con todos nosotros.
