El saneamiento económico del balompié europeo ha animado la llegada de nuevos inversores, que en los últimos dos años han comprado clubes por valor de casi 2.000 millones de euros. Y no sólo grandes magnates, sino también empresas que buscan rentabilidad en el fútbol .
En España, la centralización de los derechos de televisión, una mayor transparencia, control económico, regulación y profesionalización del sector, junto con «los precios prohibitivos de la Premier, hace que los inversores vengan a nuestro país atraídos por los beneficios que ya generan todos los clubes derivados de la evolución de esta industria», recuerda Esteve Calzada, consejero delegado de Prime Time Sport. «La pauta de inversión viene motivada por el progresivo desapalancamiento auspiciado por los nuevos parámetros y la eliminación de deuda, y por el propio atractivo del fútbol como industria, televisión, merchandising, etc.», añade Arturo Gayoso, socio de Financial Advisory de Deloitte Sports.
El previsible aumento de los ingresos por televisión (que esta temporada se estima que alcancen los 1.800 euros y la próxima, 2.300 millones) y las buenas cifras del conjunto del fútbol profesional español también están haciendo subir los precios.
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